martes, 6 de septiembre de 2011

Rescatando un texto que escribí hace algunos meses en mi penúltima visita al MyT

Memoria y Tolerancia, una camino que vale la pena andar

By d1v3r5id4d

“Podremos ver cosas que no hemos visto, a través de una persona diferente.”
Anónimo

“Aquí, como es natural, a todos se trata igual.”
“Nikaj nochi tikinitaj luikal kei tojuantij.”

Iguales pero diferentes

Nueva visita al Museo Memoria y Tolerancia, es bueno observar cómo poco a poco se va consolidando este espacio dedicado de manera especial a las personas jóvenes. Abrieron sus puertas el pasado mes de octubre. Hemos visto cómo de noviembre a febrero, sus visitantes son cada día más y que conforme aumenta el público, también se diversifica.

El MyT es un lugar para regresar una y otra vez, por las personas que le dan vida, por los temas que aborda, por la oportunidad de poder aprender a mirar diferente. El MyT es un lugar para conocer o reconocer, para imaginar, para pensar, para plantearnos con profunda seriedad reinventarnos y comenzar a hacer cosas distintas y reforzar otras.

Ayer visitamos el MyT con un pequeño grupo de docentes, se convocó aun grupo de más de 30 personas, respondieron 12. Sé que algunos de los convocados tenían planes previos a la invitación, pero la mayoría que no particpó, sencillamente no respondió. Estos 12 académicos, estoy segura de que se constituirán en el motor que mueva un trabajo consistente en el espacio de la ética y la ciudadanía en su trabajo cotidiano como profesores.

Muchos hablan y opinan sobre la ética y la ciudadanía, muchos se sienten calificados, pocos se dedican a explorar hasta llegar a la confrontación y a la autocrítica para trabajar de manera seria y consciente el camino del respeto, de la dignidad, del diálogo, del reconocimiento del otro, de la tolerancia, desde las personas que son, la vida que tienen, las actividades que realizan.

Ayer entré a la todavía pequeña y muy, muy joven biblioteca del MyT, sólo hay unos cuantos estantes, una computadora para consultar el catálogo, encontré pequeños tesoros, llamaron mi atención los pocos volúmenes, la presencia de dos textos braille, revistas que desde la portada comenzaron a enseñarme, periódicos. No tengo duda de que este lugar crecerá y que pronto no cabrá físicamente. Ahí, entre otras cosas leí: “El hecho de comprender (las cosas) nos hace más tolerantes.” Cada visita al MyT representa un nuevo aprendizaje, otro pequeño gran descubrimiento.

Hay tantas cosas que requerimos conocer, comprender, sentir y practicar que pareciera que no hay por donde comenzar, creo que si no se tiene idea, el MyT puede ser una oportunidad para explorar posibilidades. Una vez dentro, el camino para explorar el yo y el uno mismo se replantea y, desde luego reaprender a mirarnos en los ojos del otro y construirnos en la otredad.

En la visita de ayer mientras mis compañeros descubrían el camino de la memoria y de la tolerancia, yo esperé, primero en la biblioteca y luego en la recién abierta cafetería del museo. Fue muy interesante poder observar el constante movimiento de visitantes ¡bien por ello! cada vez más personas se acercan al mensaje del MyT. Vi cómo poco a poco iban saliendo mis compañeros-profesores, al preguntarles si les había gustado (quizá no era la pregunta correcta), respondían que sí, hacían una pausa y decían “bueno no”… creo que es el desconcierto que plantea el recorrido por el MyT: edificio espléndido, memoria dolorosa, terrible; tolerancia como posibilidad, como espacio para la esperanza.

Definitivamente, después de hacer este viaje por la Memoria y la Tolerancia, se sale con sentimientos contradictorios, se sale como dijo una profesora “con una tristeza que se queda”, se sale entre la desazón y la esperanza. Creo que entonces, comienza a operar el regalo que nos da este lugar: podernos redescubrir, redimensionarnos, reinventarnos y comprometernos a poner nuestro granito de arena en pro de un mejor futuro, de un “nunca más” real.

Creo que después del recorrido guiado que puede durar entre hora y media y dos horas y media, se puede salir distinto, se puede repensar de qué manera trabajar para primero, ser mejores personas y luego, para compartir y multiplicar. Estoy convencida que desde donde nos encontremos, podemos hacer muchas pequeñas cosas que ayuden a recuperar la memoria, más allá de lo que nos muestra el museo ¡es urgente recuperar la memoria mexicana, México 2010 no fue en modo alguno, suficiente. Podemos también generar espacios personales y compartidos para la tolerancia.

Un reto grande es romper el discurso de que tolerar es aguantar. Hoy por hoy, tolerar es armonizar nuestras diferencias, así lo explica y demuestra el Museo Memoria y Tolerancia. Es aprender EN SERIO, de la dimensión que alcanza la dignidad de la persona, de la capacidad para decir “esto no lo quiero porque no nos ayuda en este andar tan complejizado” entre muchos otros aprendizajes.

Hasta la próxima…

Libro recomendado hoy:
De Josep M. Esquirol, Uno mismo y los otros. De las experiencias existenciales a la interculturalidad, editado por Herder (España), en el 2005.

E imitando a la Sra. Mastretta en su Puerto Libre (Blog alojado en el diario El País), música de hoy:
La Ofrenda Musical de Johann Sebastian Bach

martes, 23 de agosto de 2011

Cobardes

Interesante que haya gente haciendo cosas por otras personas y la mayoría, en cambio, instalados en nuestra burbuja de confort...

jueves, 7 de abril de 2011

Reflexionando acerca de la docencia y el quehacer de la ética y la ciudadanía

En la mirada del otro
Mucho se dice en torno al tema de la ética; también se habla en abundancia acerca de la ciudadanía. Me preocupa, desde mi particular punto de vista que la ética y la ciudadanía de pronto parecieran desvinculadas; personalmente me cuesta trabajo separarlas.

Adela Cortina y Emilio Martínez definen a la ética "como aquella parte de la Filosofía que se dedica a la reflexión de la moral." (2008, p. 9) También estos autores escriben que "filosofamos para encontrar sentido a lo que somos y a lo que hacemos; y buscamos sentido para colmar nuestras ansias de libertad, dado que la falta de sentido la experimentamos como cierto tipo de esclavitud." (p. 9) Dos palabras que encuentro clave en estas citas son REFLEXIONAR y SENTIDO.

"La moral es un saber que ofrece orientaciones para la acción." (p. 10) Como sustantivo, la moral es la "moral vigente" lo que una sociedad concreta define como modelo de conducta. También involucra el ámbito de las convicciones personales. Es el ánimo producido por el carácter y actitudes por una persona o grupo. La moral nos obliga a tomar decisiones y a dar razón de ellas. (p. 17)

Como adjetivo, "moral" tiene como antónimo "inmoral" (valoración que permite distinguir lo correcto de lo incorrecto). Otro opuesto de moral es amoral, permitiendo así elegir si una conducta puede ser calificada como parte del acto moral. Entonces nos queda calificar un hecho como moral o inmoral.

Por otro lado, "reflexionar", nos dice la RAE es considerar nueva o detenidamente acerca de algo. En cuanto al concepto "sentido", en el mismo diccionario podemos encontrar once acepciones, de la cuales la que mejor viene a esta reflexión es la que apunta que es "razón de ser o finalidad" o "modo particular de entender algo, o juicio que se hace de ello".

Heidegger escribió que "Reflexión es el valor de convertir en lo más discutible la verdad de los propios axiomas y el ámbito de los propios fines." Para alguien que lea esto puede pensar que es de triple derivada creo, volviendo al inicio de estas ideas, que hay que conocer distinciones fundamentales, hay que instruirse, leer y leer y volver a leer, hay que entender en mayor o menor grado de qué va la ética y de qué va el sentido que permite mover a la acción.

Hace casi un año, concluí mis estudios de maestría en Ética Aplicada, a lo largo del tiempo que me tomó concluir, enfrenté una situación personal que hizo doblemente complicado el proceso. Más de alguna vez me sentí al borde del fracaso y de hecho el cierre de este aprendizaje formal fue complicado, al grado de que pude no haber concluido este reto. A través del tiempo que duró este posgrado me sentí muy por debajo de muchos(as) de mis compañeras, aprendí que debía estudiar el doble o el triple y muchas veces no fue bastante, mi vanidad se vio golpeada, mi arrogancia desmoronada, debí aprender a ser humilde y a volver a levantar la mirada a pesar de lo complejo e incierto de mi camino. Sin embargo, con el paso del tiempo, aprendí que debía valorarme y reconocer lo que he aprendido y que la experiencia adquirida no me hacían menos.

Hace poco menos de un año, participé en un proceso de formación como instructora. Comencé a formar profesores o a capacitar (esto depende del académico) en ética transversal y descubrí que es una área que me fascina. Encontré que las horas de estudio, de éxito y fracaso de la maestría habían valido la pena. Sigo siendo quizá la más pequeña de todos mis compañeros formadores, nunca la mejor ni la más conocedora y mucho menos, sabia. Y descubrí que quiero seguir haciendo este trabajo y que por eso debo seguir estudiando y  preparándome.

En el primer curso que impartí, descubrí que para trabajar la transversalidad (no importa la disciplina) debe haber una profunda convicción de que se puede lograr, una preparación constante, un orden que permita organizar y, especialmente, descubrí que se requiere una voluntad férrea, una convicción a toda prueba y que muchas veces, eso no basta. En el camino he encontrado profesores que de manera casi intuitiva son capaces de incorporar elementos para la formación ética y ciudadana y otros, que quieren hacerlo pero no saben cómo lograrlo. Hay un tercer grupo que sencillamente dice no, sin abrirse a la posibilidad de aprender a hacer de la ética y la ciudadanía una acción permanente.

Otro espacio que me fascina y en el que me he movido con más lentitud, es el de la ciudadanía ¿cómo ser mejor persona y al hacerlo ser mejor ciudadano(a)? ¿cómo enderezar aquello que me impide ser mejor persona y, en consecuencia mejor ciudadano(a)? Mejor persona en el sentido de buscar y luchar por el bien común. Mejor ciudadano(a) en el sentido de ser parte de la familia, del vecindario, de la ciudad trabajando por el bien común.

En la RAE, se lee que ciudadano es sinónimo de "hombre bueno", entonces ¿no estamos hablando de ética también? ¿Por qué esa necedad de separar a la ética y a la ciudadanía? Ética y ciudadanía deberían, deben ser en su concepción, en su teorización y, especialmente en su aplicacación, algo indivisible.

Si de ética y ciudadanía se trata, creo prioritario acercarnos y acercar a cualquier profesor que quiera intentarlo desde lo más simple hasta lo más elaborado a ambos campos de conocimiento y de aplicación. Quizá un(a) docente que no se ha desarrollado en los temas de la ética y la ciudadanía, pueda hacer mínimos cambios en su quehacer ¡está bien! lo está intentando y si lo acompañamos, podrá hacerlo mejor. Quizá otro(a) docente, podrá realizar cambios de fondo que muevan a acciones contundentes ¡afortunado(a)! Desde la ventana donde observo, "mí ventana", ambos extremos hay que saberlos respetar. Hay que saberlos guiar. Hay que dar oportunidad a que poco a poco el que quiere y está aprendiendo, vaya a su ritmo para que vaya construyendo confianza.Y el que quiere y puede hacerlo siga su exploración por la ética y la ciudadanía, cada vez con mayor profundidad.

Kirkegaard, escribió:
"Este es el secreto del arte de ayudar a los demás. Todo aquel que no se halla en posesión de él, se engaña cuando se propone ayudar a los otros. Para ayudar a otro de manera efectiva, yo debo entender más que él; pero, ante todo, sin duda debo entender lo que él entiende. Si no sé eso, mi mayor entendiemiento no será de ninguna ayuda para él. Si, de todos modos, estoy dispuesto a empacharme con mi mayor entendimiento, es porque soy un vano o un orgulloso, de forma que, en el fondo, en lugar de beneficiarle a él, lo que deseo es que me admire. Porque ser maestro no significa simplemente afirmar que una cosa es así... No, ser maestro en el sentido justo es ser aprendiz. La instrucción empieza cuando tú, el maestro, aprendes del aprendiz, te pones en su lugar de modo que puedas entender lo que él entiende y de la forma en que él lo entiende".

Estoy convencida de que es así. En los cierres de curso, casi siempre digo a los participantes que soy privilegiada porque al final del día yo aprendo de todos. Qué bonito eso de "entender lo que el otro entiende y de la forma en que él lo entiende"

He encontrado en este recorrido que hay temores pues incorporar, en este caso la ética y la ciudadanía, implican exponerse a áreas de conocimiento poco exploradas por los ingenieros, los arquitectos, los contadores, los administradores, por mencionar algunas profesiones. He hallado que es importante bajarse del pedestal de la sapiencia y aprender a acompañar con calidez y cariño, con convencimiento para así dar un sentido a los esfuerzos que se hacen para fomentar la reflexión en torno a la moral y de la mano a la vida como ciudadanos(as).

Soy afortunada porque cuando otros aprenden, yo aprendo. Cuando otros piensan, yo pienso. Cuando otros diseñan...yo me reinvento y aun así, sigo estando al final de la fila de los conocedores en cuanto a la ética y la ciudadanía. He aprendido que la ética y la ciudadanía comprometen a quien busca, a pararse frente al espejo de su alma y confrontar al yo y a uno mismo para poder, desde la sencillez y la humildad, mirar con detenimiento y respeto al otro.

Referencias:

Cortina, A. Martínez, E. (2008). Ética. 4ta. Ed. Akal: Madrid.

Kirkegaard, S. (1988). Mi punto de vista. Aguilar: Madrid

martes, 8 de marzo de 2011

Mujeres vs mujeres

A mi madre, mis hermanas, mis hijas, mis amigas

Hoy 8 de marzo de 2011 se cumplen 100 años de haber comenzado a conmemorar el Día de la Mujer. Siempre me han desconcertado la infinidad de días de celebrar que tenemos, el día del niño, el día del padre, el día de los abuelitos, el día de la familia, el día de mil y una cosas. Desde mi punto de vista, todos los días deben ser de todos por nuestra capacidad para mirarnos unos a otros, por nuestra búsqueda constante del bien común.

La RAE define a la misoginia como "aversión u odio hacia las mujeres", en el blog de Guadalupe Loaeza, hoy de puede leer una entrada "¿Misóginas?" que me parece excelente, un buen ejemplo de lo que al no educar en la equidad, en el reconocimiento de género, en el respeto y el reconocimiento de las personas, que no de "la diferencia de sexos" alimentamos las prácticas misóginas.

Por otro lado, explorando por la red, encontré un documento llamado ABC de Género en la Administración Pública editado por segunda ocasión por el Instituto Nacional de la Mujeres, en el año 2007. Puede precisar conceptos que han permanecido de forma vaga en mi mente, por ejemplo, la diferencia clara entre sexo y género.

Sexo se define como "Diferencias y características biológicas, anatómicas, fisiológicas y cromosómicas de los seres humanos que los definen como hombres o mujeres." Mientras que Género es el "conjunto de ideas, creencias y atribuciones sociales, construidas en cada cultura y momento histórico, tomando como base la diferencia sexual; a partir de ello se elaboran los conceptos de “masculinidad” y “feminidad”, que determinan el comportamiento, las funciones, las oportunidades, los valoración y las relaciones entre mujeresy hombres." (INMUJERES, 2007, p. 8)

Hace un rato, participando en un programa de radio, me preguntaban acerca de la situación de la mujer en México. Mi respuesta "optimista" es que es mucho mejor a la de otros países, pero pensándolo bien, en muchos sentidos no es mejor. ¿Cuántas mujeres hemos sufrido de algún tipo de violencia psicológica, física? En el primer caso es perturbador pensar que muchas veces ni siquiera existe la conciencia de que está ocurriendo. En el segundo que aunque se le ponga maquillaje al moretón y las marcas físicas no queden, la herida se queda ahí, en el alma, en el corazón, en el recuerdo.

¿Cuántos sueños se destrozan cuando una mujer joven, madura, anciana, se ve sometida a una devaloración permanente de su ser y peor aun, como escribe la Loaeza cuando son las mismas mujeres quienes infringen el daño? ¿A cuántas mujeres, niñas (centrando mi atención en que es el Día de la Mujer, porque también hay niños, jovencitos, hombres de distintas edades), nos hubiera gustado escuchar las palabras que la ruda mamá de "Mi villano favorito" le dice a su hijo casi finalizando la película: "Estoy orgullosa de ti y te respeto" cuando escuché esta breve frase descubrí que yo nunca la he escuchado ni la escucharé y que sin duda, yo no me había asegurado bastante de hacérselo saber a mis hijas y a mis hijos.

Esta entrada se llama "mujeres vs mujeres" pues creo que como mujeres llegamos a transitar desde la bondad más profunda y sentida hasta la dureza más fría y cortante. Entre mujeres podemos reinventar el mundo no para excluir a los hombres para complementarnos y acompañarnos en nuestras particularidades pero también como mujeres, además del escarnio sufrido históricamente, nos podemos hacer las cosas más terribles y dolorosas.
Me preguntan qué hace falta para lograr una condición de género menos vulnerable. Respondí que educación, agrego ahora que conciencia del otro(a), respeto de nosostras mismas, saber decir basta ante las injusticias y la violencia. No hay más miedo viviendo en la violencia que diciendo que no, y seguro, se gana más en la segunda opción.

Termino volviendo a compartir la maravillosa animación producida por The Girl Effect:

Hagamos una oración compartida por hacer de este mundo de mujeres y hombres un mejor mundo. Trabajemos por la erradicación de la pobreza, de las condiciones de vulnerabilidad, de cualquier situación que implique abuso, por la felicidad de los que habitamos nuestra Patria-Tierra, todas(os), cada una(o) desde donde estamos pensando en hacer cambios internos qe se reflejen y permeen en quienes nos rodean.

100 años de conmemorar el día de la mujer, eso está bien, pero qué tal si nos conmemoramos a todas y todos por nuestra capacidad para mirarnos en el espejo del otro.

P.D.1 Que Dios bendiga a Dios.
P.D.2 Aprendamos UBUNTU.
P:D.3 Escuchemos esa música que mejor nos hace sentir.

lunes, 21 de febrero de 2011

La competencia de emprender

Con un poco de imaginación
Es muy positivo contar con espacios en la red que nos permiten aprender de autores que comparten su sabiduría, aquí un texto de José Antonio Marina: La competencia de emprender ojalá puedan leer este escrito y compartir sus puntos de vista.
¡Excelente semana!

domingo, 30 de enero de 2011

La palabra escrita, yo y uno mismo (primera parte)

De "Puerto Libre", blog de A. Mastretta
"Las emociones nos embaucan a veces.
No sabemos de qué tamaño son
y andamos a tientas por algunas de ellas,
mientras las otras nos miran, compadeciéndonos.
Porque si algo tienen, las emociones,
es una capacidad tal de convivencia
que por el mismo cuerpo con que nos alegramos
pasa de pronto la pena, sin pedir permiso."

Ensalmo
“Yo,[.......] , me comprometo a vivir con intensidad y regocijo, a no dejarme vencer por los abismos del amor, ni por el miedo que de éste me caiga encima,ni por el olvido, ni siquiera por el tormento de una pasión contradecida. Me comprometo a recordar, a conocer mis yerros, a bendecir  mis arrebatos. Me comprometo a perdonar los abandonos, a no desdeñar nada de todo lo que me conmueva, me deslumbre, me quebrante, me alegre. Larga vida prometo, larga paciencia, historias largas. Y nada abreviaré que deba sucederme, ni la pena ni el éxtasis, para que cuando sea vieja tenga como deleite la detallada historia de mis días. (Citado de un texto de Ángeles Mastretta).
Yo y uno mismo

Esta semana he tenido la oportunidad de aprender y reflexionar en torno a la vida y el mundo que me rodea. Debo esta oportunidad a Norbert Bilbeny. Sin tener expectativas enormes, de pronto me sorprendió con su hablar y su modo de expresarse alrededor de grandes temas que todos(as) deberíamos ser capaces de analizar, desde nosotros primero y desde los demás después.
Mucho he pensado acerca de mantener activos los espacios en los que escribo y me expreso. He decidido que seguiré plasmando mis palabras a ratos complicadas, rebuscadas, abarrocadas pero que son a fin de cuentas espacios de expresión. Entiendo que escribir y publicar -desde mis blogs, desde mi participación en las redes, publicando una que otra cosa-, conllevan una enorme responsabilidad. La palabra escrita está ahí, comprometida, presenta. En cambio, las otras palabras, a menos que hayan sido registradas se las lleva el viento.
Bilveny ha abierto horizontes de reflexión que no imaginaba, sólo algunos pensamientos los intuía y no pasaba de ahí. El Dr. Emilio Martínez Navarro ya me había dado la oportunidad de pensar y repensar ciertos temas y ahora Norbert Bilveny, sin saberlo, me ayudó a ampliar un poquito más el círculo.
Especialista en relaciones interculturales, docente, investigador, escritor, catedrático de ética en la Universidad de Barcelona, Norbert Bilveny dejó correr como viento fresco su conocimiento, sus pensamientos, sus reflexiones, sus posturas frente a grandes temas de actualidad a través de un seminario de ética intercultural. 
Este catalán nos habló de que la razón no es la voluntad de ser razonador, ni razonable (voluntarismo), ya que es inabarcable. Nos dijo que alguien que se propone ser racional no nos informa de lo que significa razonar, apuntando que la razón es la capacidad del pensar. Un pensar que cuenta. Es el pensar que hace servir el contar. El pensamiento que segmenta y recombina datos, valores (los valores no dejan de ser datos). Colecciona elementos que se recombinan. Pensar que tiene en cuenta. Pensar que no sólo se dedica a calcular sino que interpreta, delibera, sopesa. Pensar que está más allá del cálculo apropiándose de significados que van más allá del mero pensar. Más que calcular, interpreta, más que interpretar, delibera. 
Bilveny explicó con amplitud que razonar es interpretar acompañado de deliberar. Pensar que tenemos en cuenta. Pensar que para la mayoría de nosotros RAZONAR ES EL PENSAR MÁS IMPORTANTE, EL QUE MÁS VALORAMOS pues es el razonar que hace que pensemos.
Razonar es el pensar que nos hace pensar. El razonamiento ético cuestiona todo aquello en que creemos. (Justicia, democracia, lealtad). Nos mostró el autor que la ética exige que nos cuestionemos estas aspiraciones para reafirmar o adquirir nuevas aspiraciones. Encontré que entonces, antes de hablar de ética, así a la ligera, diciendo palabras que a veces ni siquiera son entendidas, debemos pensar y razonar, debemos analizarnos a nosotros mismos, cuestionarnos, definirnos; debemos trabajar con nosotros mismos para poder entender y escuchar las razones del otro.
Tarea compleja la de que como personas, como individuos, seamos capaces de observarnos a nosotros mismos, con nuestras fortalezas, nuestras debilidades, nuestros éxitos y fracasos, nuestros encuentros y desencuentros. Reto enorme enfrentarnos con nuestra propia mirada y reconocernos, amarnos, respetarnos, aceptarnos tal y como somos. Conscientes de qué es lo que nos hace valiosos y qué es lo que en circunstancias diversas nos pudo haber demeritado.
Labor enriquecedora plantearnos, como lo dice el Dr. Emilio Martínez cuál es nuestro proyecto felicitante de vida, no todos(as) lo tienen. Es importante tenerlo, es fundamental tenerlo presente, es básico "alinear" el pensar, el decir y el hacer. Es indispensable reconocer el yo y el uno mismo y enfrentarlos, hacer que se pregunten, que indaguen, que se correspondan.

domingo, 23 de enero de 2011

"Las horas dolor"



Esta mañana he encontrado en la red, un artículo escrito por alguien que a lo largo de los años ha estado presente, ya sea porque nos encontramos, ya sea porque es una presencia silenciosa, ya sea porque se vuelve voz. Lo que encontré se llama: "Las heridas son puertas" y reaprendí, recordé y como muchas otras veces agradecí.
La vida en muchos sentidos es una largo corredor con muchas puertas. Cada vez que visito un exconvento de los muchos que hay en nuestro hermoso y golpeado país,y llego al claustro alto, cuando me detengo a la entrada de sus largos y umbríos corredores, pienso que representan la vida y su camino: el pasillo suele ser o percibirse a veces muy largo, otras, corto; sus puertas, unas abiertas, otras cerradas, son como las experiencias: unas tienen curso con intención o sin ella, y otras por decisión personal, por miedo ni siquiera las vivimos y las tomamos como oportunidad. A lo largo también hay puertas que en serie, permanecen cerradas, representan las que todavía nos falta decidir si las abrimos o no y casi siempre, al final del largo pasillo hay un gran ventanal que nos deja ver luz allá, al fondo, es la esperanza, es la confianza que al final, siempre hay una luz en el camino.
En este momento recuerdo el último convento que visité el verano pasado, el de Huichapan de Guerrero y qué pasillo y qué matices y qué paisaje al llegar al final del corredor... El espectacular paisaje del valle, es el futuro que podemos construir con sus aciertos y desaciertos. En esos pasillos también encontramos que antes de llegar a la ventana del fondo, el camino se divide cruzándose con otros pasillos y así, desde mi punto de vista, es la vida.
De las horas dolor, me enseñó la autora del artículo que les compartí, Sunny para mí desde hace muchos años, después de escuchar una de sus amenas historias, "Chonita", Chiva de corazón, mujer fuerte, valiente y muy especialmente CONGRUENTE. Alguna vez hemos tenido diferencias, como en toda relación, pero por encima de todo, está la claridad de saber que con ella puedes ir CONFIADAMENTE de frente.
La Chonita me enseñó que en la vida acumulamos horas dolor que con el paso del tiempo nos ayudan a forjar nuestro carácter, a enfrentar las dificultades con dolor pero con dignidad. Me enseñó que las horas dolor nos permiten encontrar formas para ser mejores. Me enseñó las horas dolor nos construyen, nos dejan mirarnos en el espejo con la mirada clara y en alto.
De las horas dolor he aprendido que, efectivamente, forjan nuestro carácter, nos ayudan a entender mejor la vida, nos permiten tener fuerza y valor. Nos ayudan a aprender a ser congruentes. Aprendí que las horas dolor, nos permiten mirar la verdad frontalemnte, porque al final del día nos deja en paz.
Si recapitulo mi vida, hay mucho dolor, pero si al recapitular veo la vida de muchas otras personas, ese dolor, en realidad, no ha sido tanto y entonces, vuelvo mis ojos a la gratitud y vienen a mi mente dos canciones... tres: Gracias a la vida, Sólo le pido a Dios, Cantares y, pensándolo bien, una cuarta, No te salves.
En fin esta reflexión que transita entre la vida y sus pequeños y grandes momentos me lleva a pensar sobre la importancia de ir de frente a pesar de todo, de andar con la mirada en alto (no en la altanería), con la claridad de que las horas dolor nos ayudan a andar el camino por más que a vecer duelan hasta que el aire se va y el pensamiento se llega a oscurecer.

P.D.1 Me encanta Dios.
P.D.2 Gracias al bello grupo de profesores con quienes tuve la oportunidad de trabajar este fin de semana.